Danny Weber
17:49 23-12-2025
© RusPhotoBank
Spotify detalla su respuesta al copiado ilícito atribuido a Anna’s Archive: cuentas bloqueadas, nuevas defensas anti-DRM y monitoreo para proteger derechos.
Spotify respondió de forma oficial al mayor caso de copia ilícita de contenido en su historia y detalló las medidas que está tomando para proteger la música y los derechos de autor. La declaración llegó después de una publicación de Anna’s Archive, que aseguró haber creado una réplica casi completa del catálogo de la plataforma —unos 300 terabytes— que ahora se distribuye a través de torrents.
En un comunicado actualizado, la empresa señaló que identificó cuentas de usuario específicas empleadas para copiar música de manera ilegal. Esas cuentas ya fueron desactivadas, y Spotify introdujo protecciones técnicas adicionales para prevenir ataques similares en el futuro. El servicio añadió que está monitoreando de forma activa la actividad sospechosa y que reforzó los sistemas destinados a impedir la elusión del DRM y la copia a gran escala.
Spotify remarcó además que, desde su fundación, se ha posicionado del lado de artistas y titulares de derechos en la lucha contra la piratería, y que sigue colaborando estrechamente con la industria musical para proteger la autoría. La compañía había indicado previamente que un tercero accedió a metadatos públicos y empleó métodos ilícitos para extraer parte de los archivos de audio, aunque no confirmó la magnitud que plantea Anna’s Archive.
Por su parte, Anna’s Archive afirma haber archivado metadatos de cientos de millones de pistas y los archivos de audio de decenas de millones de canciones, lo que supuestamente abarcaría casi toda la escucha en la plataforma. Spotify no respalda esa estimación y se limita a señalar que hubo acceso a algunos archivos de audio. Por ahora, el alcance del daño sigue sin estar claro, como tampoco lo está si es posible retirar datos que ya se están compartiendo.
No se ha anunciado ninguna acción legal por parte de Spotify ni de los grandes titulares de derechos, aunque especialistas apuntan que la distribución masiva de música vía torrents vulnera los términos del servicio y la legislación de copyright en muchos países. Pese a los llamamientos en nombre de la preservación del patrimonio cultural, la compañía indicó que actuará contra este tipo de incidentes y continuará endureciendo las defensas de su ecosistema. El tono deja poco margen para ambigüedades.