Demanda colectiva en Reino Unido: acusan a Qualcomm de inflar licencias y precios de smartphones

Danny Weber

18:21 07-10-2025

Londres examina una demanda colectiva contra Qualcomm por licencias infladas que habrían encarecido smartphones Apple y Samsung entre 2015-2024 en Reino Unido.

El Reino Unido ha comenzado a examinar una demanda colectiva contra Qualcomm, acusada de abusar de su posición en el mercado e inflar el precio de las licencias de sus tecnologías. Según un grupo de defensa de los consumidores, las prácticas del fabricante estadounidense de chips podrían haber llevado a que los usuarios de smartphones de Apple y Samsung pagaran de más durante casi una década.

La demanda se presenta en nombre de aproximadamente 29 millones de residentes en el Reino Unido que compraron teléfonos inteligentes entre 2015 y 2024. La posible indemnización total se estima en 480 millones de libras (unos 645 millones de dólares). De media, eso equivaldría a cerca de 17 libras —unos 23 dólares— por propietario de un smartphone.

Los demandantes sostienen que Qualcomm aprovechó su dominio en el suministro de chipsets y en la concesión de licencias tecnológicas para forzar a fabricantes de dispositivos, entre ellos Apple y Samsung, a aceptar tarifas infladas. Esos costes adicionales, afirman, acabaron repercutiéndose en los consumidores: bien en forma de precios más altos, bien mediante renuncias en la calidad o el rendimiento de los dispositivos. Es una disputa que toca el nervio de cómo las tasas de licencia, casi invisibles para el comprador, se filtran hasta el precio final.

Las audiencias se celebran en el Tribunal de Apelación de la Competencia de Londres. Como primer paso, el tribunal decidirá si Qualcomm ocupaba una posición de dominio y la abusó. Si se confirma, el caso pasará a medir el alcance del perjuicio y a fijar las compensaciones para los usuarios. Las cantidades por persona pueden parecer modestas, pero el principio en juego —quién debe asumir el coste de una tecnología esencial— resulta mucho más decisivo.

Por ahora, la compañía no ha comentado el proceso. Observadores señalan que el desenlace podría sentar precedente para otras reclamaciones antimonopolio contra grandes tecnológicas.