Danny Weber
06:11 31-10-2025
© iQOO
Conoce el iQOO Neo11 con Snapdragon 8 Elite, pantalla 2K a 144 Hz, batería de 7.500 mAh y carga de 100 W. Precios en China y versiones hasta 16/1 TB para gamers
iQOO presentó el iQOO Neo11, un nuevo smartphone construido sobre el procesador insignia Snapdragon 8 Elite. Llega con pantalla de 6,82 pulgadas a resolución 2K y refresco de 144 Hz, además de una batería de 7.500 mAh. Las ventas ya comenzaron en China con un precio de partida de 2.599 yuanes para la versión de 12+256 GB. También hay configuraciones de 16+256 GB por 2.899 yuanes, 12+512 GB por 2.999 yuanes, 16+512 GB por 3.299 yuanes y un modelo tope con 16 GB de RAM y 1 TB de almacenamiento por 3.799 yuanes.
El chasis recurre a un marco de aluminio con tratamiento anodizado para resistir las huellas. La pantalla, desarrollada junto a BOE, incorpora la tecnología Q10+ y un refresco dinámico que va de 1 a 144 Hz, con una reproducción del color muy precisa y desviaciones mínimas. En conjunto, la construcción apunta a un acabado sólido sin perder de vista el tacto diario.
En el interior, el Snapdragon 8 Elite trabaja de la mano del procesador de juegos Q2 de iQOO, memoria LPDDR5X Ultra y almacenamiento UFS 4.1. Cuando se activan las funciones de aumento de resolución y tasa de fotogramas, el teléfono es capaz de mover 2K a 144 FPS. Para mantener el rendimiento, el sistema de refrigeración 8K Ice Dome VC actualizado promete reducir la temperatura en 15 °C en apenas 10 segundos, una declaración clara de intenciones para sesiones largas de juego.
La batería de 7.500 mAh admite carga rápida de 100 W, y la marca cifra la autonomía en hasta 11,9 horas de juego continuo o 23 horas de reproducción de vídeo. La cámara principal apuesta por un sensor Sony de 50 MP con estabilización óptica, el algoritmo NICE, una reducción de ruido mejorada y un sistema LivePhoto con IA que puede eliminar automáticamente elementos no deseados de las fotos, una ayuda práctica para capturas improvisadas.
En conjunto, el iQOO Neo11 combina prestaciones de nivel buque insignia, una pantalla de alto nivel y funciones pensadas para jugar, todo ello manteniendo baja la barrera de entrada para un teléfono con un Snapdragon de primera línea. Una fórmula directa y efectiva para quienes buscan potencia sin que el precio se dispare.