La nueva AMD Radeon RX 7400 combina arquitectura RDNA 3, bajo consumo de 55 W y soporte moderno, ideal para jugadores con presupuesto ajustado y PCs compactos.
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AMD ha lanzado discretamente la tarjeta gráfica Radeon RX 7400, una opción asequible dentro de la arquitectura RDNA 3, diseñada para jugadores que buscan un buen rendimiento sin un gran gasto. Junto a ella, la compañía presentó la versión profesional Radeon Pro W7400, pensada para estaciones de trabajo. Ambas se basan en el procesador gráfico Navi 33, ya presente en modelos como las Radeon RX 7600, RX 7600 XT y RX 7650 GRE. Este chip es el más compacto de la familia RDNA 3, lo que reduce costes y permite ofrecer productos más accesibles.
La Radeon RX 7400 incorpora 28 unidades de cómputo, equivalentes a 1.792 procesadores de flujo, lo que supone un 12,5 % menos que en la RX 7600. Dispone de 8 GB de memoria GDDR6 con un ancho de banda de 10,8 Gbps, un 40 % por debajo del modelo superior, alcanzando una velocidad total de 173 GB/s. Entre sus especificaciones se incluyen compatibilidad con DisplayPort 2.1 y HDMI 2.1. Su diseño de una sola ranura, con una longitud de 167 mm, no requiere alimentación adicional, y su consumo es de apenas 55 W, lo que la hace apta para fuentes de 450 W.
Aunque AMD no ha revelado aún el precio de la Radeon RX 7400, teniendo en cuenta que la RX 7600 salió al mercado a 269 dólares, es previsible que esta nueva tarjeta se sitúe en un rango más económico. La empresa apuesta por la eficiencia energética y el formato compacto, ofreciendo soluciones que se adaptan tanto a PCs de juego de bajo coste como a configuraciones profesionales.