Airbus y Yuanxin se alían para llevar banda ancha satelital de baja latencia a la aviación

Airbus y Yuanxin Satellite, de China, anunciaron una alianza estratégica dentro del ambicioso proyecto Thousand Sails Constellation (Qianfan Constellation). El contrato, firmado durante la 2025 Satellite Internet Ecosystem Conference, apunta a desplegar una red de banda ancha satelital de alta velocidad y mínima latencia.

Airbus prevé integrar la constelación de Yuanxin en sus servicios a bordo mediante un sistema de conectividad de alta velocidad. La medida, destinada a elevar de forma notable el acceso a internet de los pasajeros, también busca impulsar la eficiencia en la gestión de flota. La nueva plataforma se desarrolla con foco en un rendimiento estable a tasas de datos muy elevadas y en una cobertura verdaderamente global.

Las compañías aseguran que concentrarán sus esfuerzos en lo que más importa a las aerolíneas: una banda ancha fiable y con baja latencia. Esto abarca servicios inteligentes y personalizados, desde un entretenimiento a bordo más completo hasta telemetría en tiempo real y optimización de rutas. El trasfondo es nítido: una mejor conectividad puede ser, a la vez, un plus para el viajero y una palanca de eficiencia operativa, una combinación que podría empujar a la aviación civil hacia un crecimiento de mayor calidad. Es una apuesta que encaja con un sector que busca, a partes iguales, satisfacción del cliente y operaciones más finas.

Según explicó anteriormente Li Gotong, director de tecnología de Yuanxin Satellite, las pruebas de los satélites y de la infraestructura orbital de la Thousand Sails Constellation validaron plenamente el desempeño anunciado. Añadió que el sistema también superó ensayos en escenarios de aplicación en el extranjero.

La constelación Qianfan está concebida para ofrecer banda ancha satelital en todo el mundo con alta velocidad, baja latencia y mayor fiabilidad. La red es compatible con los estándares de comunicaciones actuales y puede evolucionar hacia 6G. Con el tiempo, el proyecto pretende entrelazar en un mismo tejido las redes terrestres, aéreas, marítimas y satelitales.