Yamaha YH‑C3000 y YH‑4000: auriculares audiófilos hechos en Japón
Yamaha amplía su gama audiófila con los YH‑C3000 y YH‑4000, hechos en Japón, con transductores Armodynamic y ortodinámicos, materiales premium y detalles clave.
Yamaha amplía su gama audiófila con los YH‑C3000 y YH‑4000, hechos en Japón, con transductores Armodynamic y ortodinámicos, materiales premium y detalles clave.
© Yamaha
Yamaha amplía su catálogo para audiófilos con dos nuevos auriculares —YH‑C3000 y YH‑4000—, ambos fabricados en Japón e inspirados en el buque insignia YH‑5000SE.
El YH‑C3000 es un modelo cerrado con un precio de $1,699. Estrena transductores Armodynamic con un diafragma de tres capas —papel, resina y ZYLON, el mismo material que Yamaha emplea en sus altavoces de gama alta—. Sus cúpulas de haya, la misma madera de sus pianos, aportan un sonido natural y equilibrado; una decisión que también suena a guiño discreto a las raíces acústicas de la marca.
El YH‑4000 llega en formato abierto por $2,499. Hereda del YH‑5000SE los transductores ortodinámicos y un chasis ultraligero de magnesio, pero apuesta por una afinación distinta: más reactiva, más transparente, más natural. Al eliminar parte de los elementos fonoabsorbentes, el peso baja hasta 320 gramos, situándolo entre los más ligeros de su clase; una jugada clara en favor de la comodidad durante sesiones largas.
Ambos modelos incluyen almohadillas de espuma con memoria y un sistema de ajuste regulable. El YH‑C3000 cubre de 5 Hz a 55 kHz con una impedancia de 34 ohmios. La producción corre a cargo de la fábrica de Yamaha en Kakegawa —el mismo recinto donde se ensamblan sus legendarios pianos de concierto—, un pedigrí que rara vez acompaña a la ficha técnica de unos auriculares.
En esencia, Yamaha propone alternativas más accesibles —dentro del segmento de alta gama— al YH‑5000SE, sin renunciar a materiales de primera y a una visión sonora muy propia. Es un movimiento medido que preserva la identidad de la casa y, a la vez, abre la puerta a un público más amplio.