Digital Foundry confirma: Battlefield 6 alcanza 60 fps en Xbox Series S a 1080p, sin ray tracing y con optimización del motor Frostbite para juego fluido.
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Xbox Series S sigue demostrando que un formato compacto no equivale a rendimiento recortado. Las pruebas de Digital Foundry del nuevo Battlefield 6 de DICE muestran que la Xbox más pequeña se desenvuelve en el shooter con una solvencia que sorprende para su tamaño.
A pesar de las limitaciones del hardware, la Series S mantiene 60 fotogramas por segundo estables en su modo Equilibrado. El equipo apostó por la optimización y dejó fuera funciones pesadas como el trazado de rayos para priorizar la fluidez. A 1080p, con sombras e iluminación simplificadas, el juego conserva la adrenalina de los tiroteos y el multijugador se mantiene firme. Es un intercambio pragmático que favorece la sensación de juego por encima del brillo técnico.
El director técnico de Battlefield 6, Christian Buhl, comentó que el juego tuvo problemas iniciales en Series S por su presupuesto de memoria más ajustado. Los ingenieros replantearon la gestión de recursos del motor Frostbite, lo que elevó el rendimiento de todo el juego y no solo del modelo compacto de Microsoft.
Digital Foundry señala que en todas las plataformas aparecen pequeños tirones puntuales, y Series S no es la excepción. Aun así, la versión afinada permite competir en condiciones parejas con quienes juegan en máquinas más potentes.
Battlefield 6 ya vende por millones en todo el mundo, y Series S demuestra que una consola asequible puede ofrecer una experiencia de shooter moderna y convincente cuando la optimización se pone primero. Un recordatorio discreto de que la buena ingeniería pesa tanto como las especificaciones brutas.